Todavia recuerdo el primer dia de clases. Estaba ansiosa, contenta, curiosa. Tenia mochila, cartuchera y lapices nuevos. Mi mama me habia forrado el cuaderno con imagenes de Disney mostrando asi mi devocion hacia las peliculas de dibujos animados.
El aula tenia mesas pequeñas de colores y cada mesa tenia cuatro sillas alrededor. Habia bibliotecas al lado de la ventana, en ella libros, entre ellos el gran libro "Cuentos para Espacionautas".
Me sente en la silla color azul. Al lado mio una niña de cachetes rosa regordetes llena de pecas negras.
Hola! Te muestro mi cuaderno .- le dije. Me sonrio y empezo a mostrarme el suyo. Fue mi mejor amiga hasta quinto grado.
Todo estaba bañado de un color amarillo. La maestra tenia panza, piernas y brazos para envolvernos.
Todo era simpatico, alegre, limpio, nuevo.
Rostros nuevos, inquietantes.
Todos mirabamos todo. Pecas, rulos, dientes, medias, llanto, lapices, cartucheras, mochilas, cuadernos, piojos.
El primer instante de todo eso fue abrumador y desafiante.
Cambios
A mis treinta recuerdo ese cambio
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